En estos días en que la lluvia amaga un poco y está medio que sí que no, considero que es un buen momento de recordar aquella película que, al menos a mí, me hizo querer mucho a los pilotos y a los paraguas. Con ustedes, el recopilado berreta y alusivo:
La obra maestra
(no siempre fue tan jovial y amena)
(pero no sólo inspiró el pánico y la ultraviolencia)
(también nos inspira a los menos talentosos que la homenajeamos como podemos)